DADAÍSMO Y ERIK SATIE

Averigua las características principales del movimiento dadaísta e intenta encontrar similitudes con la música de Erik Satie.  

  • Es un movimiento vanguardista que surge en Zúrich en el año 1916 de mano de los artistas refugiados de la Primara Guerra Mundial. 
  • Tristan Tzara fue el fundador del movimiento dadaísta. 
  • Rompe con los modelos tradicionales y por lo tanto tiene un fuerte contenido anárquico y espíritu de protesta. Es un movimiento anti-burgués, anti-nacionalista y anti-materialista y se manifiesta en contra de la guerra. Además, también rechaza el consumismo y el capitalismo. 
  • Se busca el caos, lo irracional, lo ilógico. 
  • Destaca su carácter irónico, radical, agresivo y pesimista. 
  • Se tiene preferencia por la espontaneidad y la improvisación. 

RELACIÓN DEL DADAÍSMO CON LA MÚSICA DE ERIK SATIE

Erik Satie busca que su música no tenga intención artística, sino que sea funcional, que acompañe al escuchante en su día a día. Esta será denominada años más tarde como música ambiente. Satie pretendía romper con el concepto anterior de la escucha activa de la música, moviéndolo a una posición secundaria, acompañante. 


La idea no fue entendida por el público, ya que en su estreno en una galería de arte, el público no entendió el concepto y en vez de continuar disfrutando de la exposición teniendo su música de fondo, se paró a escuchar las obras.

Satie también buscaba una fusión entre lo originalmente destinado hacia las élites y la burguesía y entre las clases populares. 

Así, en 1917, un ballet Dadá de Erik Satie se estrenó. Este se llamaba “Parade” y contó con un equipo excelente de escenógrafos, escritores y bailarines. La idea era crear un ballet “vulgar”, que introdujera elementos de la cultura popular. Satie lo logró incorporando melodías populares y ruidos.
La recepción del público y los críticos, de nuevo, no fue favorable. Sin embargo, entre las élites más progresistas sí se vio con buenos ojos esta innovación.

Satie introduce nuevas técnicas artísticas, como las que aparecen en su ballet “Relache”, publicado en 1924. Cabe destacar los pequeños cortos que se conciben como preludio e interludio del ballet, de los que Satie compone la música. En estos aparecen imágenes propias del dadaísmo, sorprendentes y diferentes. 



BIBLIOGRAFÍA



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